Oarso
DE GARAJE A CASA
Era un garaje. Coches, trastos, lo de siempre. Pero la familia quiso darle otra vida: un sitio donde sus hijos pudieran quedarse cuando salieran por el pueblo, sin tener que volver a casa cada vez.
El espacio estaba en pleno centro, pero no era fácil. Calles estrechas, poca luz, normativa complicada. Se pensaron soluciones: mantener el hueco original con vidrio translúcido, retranquear la fachada para crear un pequeño porche… pero ninguna fue aceptada. A pesar de haber hablado incluso con quienes redactaron la normativa, hubo que adaptarse.
Lo importante se mantuvo. El hueco original sigue marcado en la fachada, como memoria. El suelo cerámico recuerda un exterior, la madera da calidez, y todo -colores, luces, proporciones- está pensado para que al entrar, haga sentir bien.
DE GARAJE A CASA
Era un garaje. Coches, trastos, lo de siempre. Pero la familia quiso darle otra vida: un sitio donde sus hijos pudieran quedarse cuando salieran por el pueblo, sin tener que volver a casa cada vez.
El espacio estaba en pleno centro, pero no era fácil. Calles estrechas, poca luz, normativa complicada. Se pensaron soluciones: mantener el hueco original con vidrio translúcido, retranquear la fachada para crear un pequeño porche… pero ninguna fue aceptada. A pesar de haber hablado incluso con quienes redactaron la normativa, hubo que adaptarse.
Lo importante se mantuvo. El hueco original sigue marcado en la fachada, como memoria. El suelo cerámico recuerda un exterior, la madera da calidez, y todo -colores, luces, proporciones- está pensado para que al entrar, haga sentir bien.
Gracias por visitar dendu,
Si estás preparado para crear la casa que llamarás hogar durante años, nos encantará acompañarte.
